lunes, 13 de abril de 2009

novela de terror en dos líneas


Llevaba el monedero, el DNI, el abono transportes...


Sólo que todo estaba cambiado de bolsillo.

1 comentario:

LEVIATÁN dijo...

¡Dios: todo en bolsillos diferentes!. Karloff sufrió algo parecido... fue monstruoso